Este año ha sido especialmente lluvioso y nosotros hemos multiplicado nuestras salidas debido a las inundaciones. En muchas ocasiones, los daños se podían haber reducido considerablemente si las alcantarillas hubieran tenido un correcto mantenimiento.
La limpieza de los sistemas de desagüe y alcantarillado es fundamental para que las calles puedan desaguar cuando llueve. Si no, el más mínimo chaparrón puede producir daños en locales, viviendas, garajes, etc.